Lo que sí se está haciendo desde el departamento dirigido por Manuel Vázquez es facilitar que aumenten las capturas, mediante el establecimiento de un mínimo de reglas del juego que no entorpezcan las cazas mayores.
Desde Medio Ambiente no dudan en confirmar además que son precisamente los propietarios de los terrenos cinegéticamente ordenados (Tecores), sobre los que recae la responsabilidad patrimonial de los daños que el jabalí cause en las fincas. En estos casos, la Xunta solo la tendría si la agresión se produce en un espacio protegido o de titularidad autonómica. De hecho, los pagos de 1.200 euros que ofrece la Administración gallega se corresponden con ayudas compensatorias y no con indemnizaciones, porque no es la responsable de los daños. Sí se hace cuando el titular de los terrenos no tiene capacidad económica para asumir esos gastos. De hecho, según la Consellería, se crearon estas ayudas para aliviarla tensión entre titulares y ganaderos por este tema. |