Revista de Prensa


· 8/1/2015

El grupo ecoterrorista ALF (Animal Liberation Front), una de las organizaciones ecoterroristas más perseguidas y peligrosas del mundo, arroja un artefacto explosivo contra la sede de la Federación de Caza de Castilla y León. Se produce sólo unas semanas después de que la organización Lobo Marley difundiera un vídeo destruyendo varios puestos de caza en la Sierra de la Culebra advirtiendo a los espectadores de que “se preparasen”.

El ecoterrorismo sigue presente en España. Esta misma mañana, un individuo encapuchado ha irrumpido en la sede que la Federación de Caza de Castilla y León tiene en Valladolid y ha arrojado un bote de humo al tiempo que gritaba “asesinos” a los trabajadores que en esos momentos se encontraban ahí. El individuo dijo actuar en nombre del Animal Liberation Front (Frente de Liberación Animal), un conocido grupo terrorista perseguido por las policías de medio mundo, con el FBI a la cabeza. Afortunadamente ninguna persona ha resultado herida tras el ataque, que ya está siendo investigado por los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, los cuales han tomado muestras de los restos del artefacto explosivo.

Este atentado surge pocos días después de que Luis Miguel Domínguez, un extremista que asegura defender al lobo ibérico a través de su organización Lobo Marley, difundiese un vídeo a través de youtube en el que, según narraba, aparecía destruyendo varios puestos de caza, supuestamente ubicados en la Sierra de la Culebra con total impunidad y a cara descubierta. Aunque las autoridades españolas no tienen catalogada a esta organización como grupo ecoterrorista, lo cierto es que las técnicas de sabotaje han sido una de las señas de identidad de estos grupos fundamentalistas desde que este tipo de terrorismo surgiera en Inglaterra a mediados del pasado siglo.  En ese vídeo, que reproducimos más abajo, el propio Luis Miguel Domínguez lanzaba un mensaje amenazante a los cazadores: “preparaos porque hay más… ¡mucho más!”.

Imagen de archivo de las detenciones ecoterroristas realizadas en 2011 en España. /EFE

Estos nuevos ataques tienen lugar casi cuatro años después de que la Guardia Civil asestara el mayor golpe contra el ecoterrorismo en España. El pasado 22 de junio de 2011 el Juzgado de Instrucción de Santiago de Compostela ordenó la detención de 12 individuos en una operación que se desarrolló de manera simultánea en cuatro provincias españolas. Cuatro de los arrestos se practicaron en Vizcaya y los restantes en Madrid, Asturias y Galicia. Entre los detenidos, se encontraban conocidos representantes de organizaciones como Equanimal, principal instigadora, entre otros, de los actos de sabotaje del campeonato nacional de caza del zorro que todos los años se celebra en tierras gallegas.