Revista de Prensa


· 10/3/2008

«Conocemos las normas de Medio Ambiente, nos enseñaron unos planes para el parque y tememos que afecten a nuestra actividad cinegética, pues estaríamos sujetos a lo que ellos decidiesen», afirma sin rodeos Francisco Díaz Calvo, presidente del tecor 10.004 Pena do Mouro, de Navia de Suarna.

Semanas atrás reunieron unas 300 firmas para solicitar que el terreno de este coto quede fuera del parque natural. Los seis permisos para perdiz que, según dicen, ha repartido la Xunta en la reserva de caza que el Gobierno autonómico gestiona desde hace décadas en el corazón ancarés son para ellos información más que suficiente. Son 70 socios y propietarios y no solo temen las restricciones a la caza. Asimismo, dicen tener el apoyo de personas preocupadas por las limitaciones de los parques a la hora de pescar, extraer madera, abrir caminos, intervenir en las casas o realizar rutas todoterreno, que en Navia de Suarna gozan ya de bastante aceptación.

«También queremos recoger firmas para ir en contra de la inclusión en la Red Natura 2000 que nos impusieron hace unos años, sin preguntar a nadie. También se aprobó sin consultar la reserva de la biosfera», dice Díaz Calvo.