Ayer trabajaron cinco cuadrillas aunque en toda la operación trabajan seis, con referencias locales y buen número de cazadores integrados de otras zonas. La cuadrilla de Sito de Goias cazó 5 ejemplares en una de las zonas donde el maíz fue más castigado. Tanto que en la noche anterior destrozó cultivos recién replantados. Era la zona de A Veiga, Val do Boi y bordeando con Alperiz y Maceira. En el lugar se pudo ver una manada de once.
La otra cuadrilla que obtuvo premio a su esfuerzo fue la de Seijas y Gabino de la zona de Palio. Mataron tres machos en la zona de Sello, Montrigo y Mouroces. Los dos primeros los habían cazado el sábado la cuadrilla del Cazador de Catasós y la de Manolo de Alperiz. Todavía, sin suerte permanecen las de O Gaiteiro de Soutolongo y la de Prado, pero tienen por delante, todas, muchos días de caza. El próximo fin de semana únicamente será el sábado porque los cazadores celebran el domingo su fiesta gremial; pero el programa incluye el resto de sábados y domingos de junio.
Y, según explica el presidente de la sociedad de caza, será difícil cubrir el cupo de 18 ejemplares por jornada dadas las condiciones climáticas. El presidente, Luis Nistal, insiste en que le indican que no hay sobrepoblación «pero está onde non debe estar» y asegura que las batidas son ahora un parche porque «non pode estar competindo con quen ten que vivir dos cultivos, pero non é solución».
En algunos puntos como A Veiga y Sello acompañaron ganaderos a las cuadrillas, aportándoles información. Ayer el secretario xeral de Unións Agrarias, Román Santalla, que respalda la actuación, se mostró satisfecho por los resultados pero recordando la necesidad también de acciones estructurales.