Los cazadores de O Salnés inician las batidas de jabalí tras la aparición de varios maizales seriamente dañados por la acción de estos animales. Algunos de los puntos en los que se han localizado los estragos son Cabeza de Boi y Castiñeira (ambos en la parroquia de Armenteira, Meis), en Simes (Meaño) y en O Sixto, entre Vilagarcía y Vilanova, donde los jabalíes incluso escarbaron bajo las parras de vino.

Así las cosas, los cazadores de la sociedad de Armenteira iniciaron sus batidas el domingo 17, y tras descansar el domingo pasado, volverán a rastrear el monte el día 31. En el caso de la sociedad de Meaño, su primer día de caza de jabalí fue el domingo pasado (día 24) y pretenden repetir el próximo.

La intención de los cazadores es controlar las poblaciones de jabalí y evitar de este modo los daños en los cultivos agrícolas de las fincas más próximas al monte.

En el caso de Armenteira, el presidente de la sociedad, Juan José Millán apunta que "el primer domingo que fuimos matamos uno y nos escaparon tres o cuatro", y que en el caso de los terrenos que les corresponden a ellos "estamos notando que la densidad de jabalíes es estable, pero con una ligera tendencia a que suba". La temporada pasada habían abatido nueve piezas.

En el caso de los cazadores de Meaño, el presidente de la sociedad Corazón do Salnés, Rafael Otero señala que el primer día se cobraron dos ejemplares (una hembra de unos 60 kilos y un macho joven de unos 20), y aunque dice que todavía es muy pronto para hacer una estimación de la densidad de puercos salvajes en el monte arousano "en principio parece que hay menos que el año pasado". En la pasada temporada abatieron más de una decena de piezas (a las que habría que sumar las 9 de Armenteira, al pertenecer ambas zonas al mismo Tecor, cuyo presidente es precisamente Rafael Otero), incluyendo varios machos adultos que en algunos casos sobrepasaban el centenar de kilos de peso.

Los ciclistas

Los cazadores piden mucha precaución a los ciclistas y otras personas que vayan por el monte el próximo domingo, y que respeten las zonas acotadas por batida para evitar los riesgos.

Recientemente, se generó una polémica en Armenteira porque los comuneros de esta parroquia de Meis colocaron unos carteles prohibiendo el paso de los vehículos a motor y las bicicletas por varias pistas secundarias y terciarias del monte.

Los aficionados al ciclismo de montaña protestaron, y aunque inicialmente el alcalde de Meis, José Luis Pérez apostó por conciliar las dos posturas, de modo que solo se prohibiese el paso de los ciclistas los días de caza (alegaba que solo serían unos diez domingos entre octubre y enero) al final los comuneros y los cazadores acordaron retirar por completo la prohibición.

Eso sí, los aficionados a la caza de Armenteira piden a los ciclistas que sean precavidos los días de batida y que no entren en las zonas y los caminos acotados, para evitar riesgos con las armas de fuego o los perros.