Un cazador de 55 años, Dositeo F., murió ayer al recibir un disparo accidental durante una batida de jabalíes en el alto de Biobra, situado en el municipio ourensano de Rubiá.
Al parecer, el disparo procedía de un compañero de la peña de caza de la que formaba parte la propia víctima. El fallecido era vecino de O Barco de Valdeorras y realizaba frecuentes visitas a Rubiá porque allí reside su familia, que es originaria de León. El suceso ocurrió ayer a última hora de la tarde y causó gran conmoción en la zona.
Los accidentes relacionados con cacerías son frecuentes en Galicia. El año pasado, un cazador mató a otro de 23 años de un tiro durante una batida de jabalíes en el municipio pontevedrés de Vila de Cruces.