Revista de Prensa


La presencia fortuita de un grupo de personas filmando la naturaleza ha propiciado la condena a dos vecinos de Dumbría que fueron sorprendidos in fraganti colocando veneno en un potro muerto en Chan das Lagoas, para matar lobos.
Xavier Lombardero · 27/5/2010

Según la Asociación para la Conservación y el Estudio del Lobo Ibérico (Ascel), que se personó en la causa como acusación particular, la jueza impuso una multa de ocho meses, a razón de seis euros diarios cada uno, a los dos condenados, que deberán pagar las costas y no podrán cazar durante un período de un año.

«Aínda así, tendo todas as probas, impuxéronlles a pena mínima, cando noutras comunidades autónomas terían que pagar o dobre», señaló Rubén Portas, de Ascel Galicia. En este caso, los autores fueron perfectamente identificados, la Guardia Civil levantó atestado y el fiscal pidió un año de cárcel para cada uno. br />
Ascel también se personó en otro caso en el que fueron identificados dos individuos mientras colocaban lazos en un monte de la Costa da Morte en el que habían sido hallados muertos al menos un lobo y dos jabalíes. Esta asociación lamenta que no se haya investigado el caso de otra loba muerta tiempo atrás en Chantada y avisa que será acusación particular para que estos delitos ambientales no queden impunes y se impongan penas ejemplares. br />
Casi 70 grupos de lobos br />
Rubén Portas asegura que el lobo se alimenta casi exclusivamente de ganado equino en la zona de la Costa da Morte, una vez que la AP-9 cortó la expansión del corzo hacia ese territorio y otras múltiples infraestructuras han invadido su hábitat natural. br />
Ascel Galicia también lamenta el sensacionalismo y la persecución que generan los ataques de este animal, que ha convivido durante miles de años con el ser humano y para cuyos daños existen indemnizaciones. «Hai entre 60 e 70 grupos reprodutores de lobo en toda Galicia e contabilicei uns 1.300 ataques ao gando cada ano. Este dato, tendo en conta que hai 1,6 millóns de cabezas de gando na nosa comunidade, supón que os ataques só afectan ao 0,01% destes animais», concluyó Portas.