Revista de Prensa


Poca mortalidad entre los mamíferos y buen crecimiento para los polluelos por las escasas lluvias. Optimismo con el faisán barcalés
M.M.O. · 11/10/2011

Las valoraciones previas para una actividad deportiva, como la caza, de tanto arraigo son siempre complejas por todas las variantes que se pueden dar dependiendo de cada zona, enfermedades, periodos reproductivos, repoblaciones y la falta de estadísticas para poder establecer planes de ordenación cinegéticos adecuados. Sin embargo, la percepción es sumamente atractiva.

Así, los expertos se encuentran con un año atípico donde el conejo, una de las especies de referencia para los amantes de la escopeta, fue respetado, y para la perdiz el tiempo seco facilitó una buena reproducción. Haciendo un recorrido por la comarca compostelana, en Arzúa las tempranas repoblaciones de perdices no dieron el fruto esperado y las alimañas acabaron con la mayoría. En A Baña tampoco se detectó mortandad en el conejo y el optimismo reina entorno al faisán, mientras que los cercedenses destacan la presencia de bandadas de perdices. En Rois, el conejo parece menos abundante, pero se destaca la presencia de perdiz, becacina, arcea, pombo y pato.

En Melide, Ordes, Oroso, O Pino, Padrón, Todoia, Trazo, Dubra y Vedra, la conclusión es similar: el tiempo seco aumentó la cría de la perdiz y se ven conejos.