Unións Agrarias actuará con contundencia si las sociedades de caza no responden de manera favorable al llamamiento del sindicato para realizar batidas de jabalí antes de que los ganaderos procedan a la recogida del maíz, que acostumbra a realizarse después del verano. La central sindical anuncia que respaldará a los productores que decidan reclamar por vía judicial las pérdidas derivadas de los ataques del animal que no estén cubiertas por las ayudas que concede la Consellería de Medio Ambiente. En esta línea, ya advierten que los afectados demandarán judicialmente a los tecores «que de forma irresponsable e inxustificada» se nieguen a organizar batidas con antelación a la recogida del cereal.

Unións Agrarias apela a la colaboración de los cazadores desde la responsabilidad que tienen en el control de las poblaciones de jabalí que, en las semanas previas a la recogida del maíz, recrudece sus ataques sobre el cultivo, al igual que sucede en la época de la siembra. En vista de esa circunstancia y de la proximidad de la tarea agrícola, prevista para octubre, el sindicato requiere la organización de batidas para prevenir daños que impedirían recuperar el producto. Así, realizar cacerías después de la recogida del cereal no tendría sentido, tal y como apuntan desde el sindicato que, por otro lado, recuerda que la medida no sería extraordinaria, puesto que la temporada de caza se abrió el pasado 24 de agosto.

La colaboración que Unións Agrarias requiere de los tecores está encaminada a evitar situaciones como a las que hicieron frente ganaderos de Cardama. En esa parroquia del municipio de Oroso, hay afectados por ataques de jabalí en sus cultivos con pérdidas superiores a los 6.000 euros, según apunta el sindicato, que atribuye esos casos «á falla de planificación e da eficacia na colaboración dos tecores para poñer en marcha batidas nos momentos oportunos, como é o período previo á colleita».

Los servicios jurídicos de Unións Agrarias se pusieron al servicio de esos afectados para reclamar por vía judicial a las sociedades de caza de la zona las pérdidas que no cubren las ayudas de Medio Ambiente ya que estas no exceden en ningún caso de 1.200 euros.

Oroso fue uno de los municipios más afectados por los ataques de jabalí la pasada primavera, cuando el animal se cebó principalmente con los cultivos de maíz al coincidir con una de las épocas más sensibles a los ataques como es la de la siembra del cereal. La situación también fue extensible a los concellos de la comarca de Arzúa, tal y como en su momento puso sobre aviso Unión Agrarias que, al igual que ahora, instó a los tecores de la zona a colaborar. Entonces, la respuesta fue positiva y la Consellería de Medio Ambiente autorizó batidas.