Ahora, meses más tarde, varios perjudicados indicaron que cobraron por los daños causados por los puercos bravos. Al parecer, la sociedad de caza pagó las indemnizaciones que solicitaban, aunque no trascendió la cifra acordada. En su día, los propietarios de las fincas de Dorrón habían valorado en unos 60.000 euros los destrozos provocados por los animales salvajes, puesto que perdieron toda la cosecha. «Houbo acordo aínda que os cazadores estaban algo molestos», destacó uno de los vecinos. «O certo é que as Administracións teñen que facerse cargo de todo isto, xa que os feitos denunciáronse ante a Xunta», añadió. Los afectados indicaron que los jabalíes le fulminaron toda la cosecha del año pasado.