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Buscan a una banda como autora de intentos de robos de rifles en Vilalba

La forma de actuar revela un comportamiento profesional de varias personas

| Xosé María Palacios · 6/10/2016

Un intento de robo, un robo y otro intento de robo con el mismo objetivo, conseguir rifles de cazadores que estaban o podían dentro de coches aparcados cerca la misma carretera. Son tres acciones cometidas en la Terra Chá en las últimas semanas, y las primeras investigaciones ofrecen ya algunas pistas: parece claro que se trata de una banda organizada y que su forma de actuar revela conocimiento de la zona y de los cazadores que puede haber en un sitio en un determinado momento.

APERTURA DE MALETEROS

Solo se buscan coches que resulten fáciles de abrir y luego no quedan pistas. En Leguadereita (Vilalba), dos veces hubo intentos de robos vehículos de cazadores que estaban aparcados en el área recreativa, cercana a la carretera LU-541. En el segundo intento, cometido en la tarde del sábado pasado, fueron asaltados dos turismos y otro quedó intacto. No parece casualidad, porque el que no sufrió daños -los tres eran de marcas distintas- era el único a cuyo maletero no se puede acceder rompiendo el cristal trasero. En ese caso, si se quiere llegar al maletero, hace falta reventar la cerradura. Por otro lado, la forma en que se rompieron las lunas traseras de los otros dos coches indica una forma de actuar nada chapucera o expuesta a riesgos, porque no se emplearon piedras; parece que se utilizó alguna palanca y que se inició la rotura por alguno de los laterales.

INFORMACIÓN

Datos sobre los cazadores. Los tres rifles que se robaron el mes pasado a la cuadrilla Fontefría fueron sustraídos mientras los respectivos dueños, con otros del grupo, hacían un alto a mediodía en esa zona del municipio de Begonte, cercana también a la LU-541. Los dos intentos de robo cometidos en Vilalba tuvieron lugar por la tarde, mientras los integrantes de la cuadrilla, perteneciente al tecor Río Ladra, estaban cazando. Ese comportamiento parece revelar que se dispone de información sobre los movimientos de los cazadores, que seguramente, según comentó ayer uno de los de la segunda cuadrilla, se consigue por equipos radiotransmisores, con lo que se logra saber por dónde y cuándo se mueven los cazadores. Para lograr esa información no hace falta una gran tecnología, y además se puede conseguir información de más de un miembro de la cuadrilla.

PARTICIPACIÓN

Una banda de varias personas. Hechos como esos requieren la participación de varias personas, pues se da por seguro que mientras al menos una se dedica a asaltar los coches, otra permanece por los alrededores vigilando que nadie los vea o se acerque mientras actúan.

OBJETIVO

Las armas, el único botín buscado. Tanto en los coches de cuyo interior se robaron tres rifles como en los que sufrieron un intento de robo había otros objetos de valor -ropa o cámaras, por ejemplo-. Sin embargo, lo único que se sustrajo o se intentó sustraer eran los rifles.

DESTINO

Piezas que van a otro país o que acaban en el mercado negro. Un rifle puede tener salida en la reventa, tanto si se lleva a otro país -Portugal, el más cercano- o si se vende en el mercado negro. Personas que carecen de permiso de armas o que en los últimos años han sido privadas de esa autorización pueden estar interesadas en comprar un arma. El precio hasta puede ser superior al de una nueva -un rifle como alguno de los robados en Fontefría podría costar unos 2.000 euros-; pero esas personas se evitan a cambio el gasto en licencias y otras tramitaciones.

FÁCIL HUIDA

Lugares bien comunicados. Tanto la zona de Fontefría como la de Leguadereita no solo están al lado de la carretera Rábade-Vilalba sino cerca de autovías: en apenas diez minutos se llega a la A-6, a la A-8 o a la AG-64, con lo que las posibilidades de alejarse pronto del lugar de los hechos son amplias.

PREVENCIÓN

Los cazadores prevén vigilar. Tras dos intentos de robo en pocas semanas, los cazadores del tecor Río Ladra prevén efectuar labores de vigilancia para que no se repitan esas situaciones. La forma en que se actuará será tener un cazador vigilando cerca de los coches -un papel en el que la cuadrilla se irá turnando- mientras los demás están cazando. Con ello, si alguien se acerca como en semanas pasadas, se pretende poder conseguir datos del coche o del coche en que lleguen y de las personas que pueden formar parte de esa banda.



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